Día a día depositas tu confianza en alguien, le das una pequeña parte de ti, esperando por su parte que la cuide. Confías y confías y esperas no tener que arrepentirte de ello. Y te comprometes con esa persona, te comprometes a sacrificarte, a luchar, a cuidarla... Y lo único que esperas es que hagan lo mismo por ti. Puede entonces, que nuestro problema sea que esperamos demasiado, o que damos demasiado rápido.
Nadie se salva de las decepciones, por mucho que lo intentes y te protejas, quien menos te lo esperas, te decepcionara. Nos movemos por sentimientos. El ser humano vive condicionado por sus instintos, más bien en la redención de esos instintos.
¿Qué pasa cuando rompes ese compromiso, esa confianza? Esa pequeña parte de ti que has dado o que te han dado se acaba, se muere y desaparece. Y es que la confianza una vez que se pierde es prácticamente imposible recuperarla. Entonces se convierte en esa persona que solía saber todo de ti, que solía hacerte sentir bien pero que ahora ya ni sabes que posición ocupa en tu vida.
Finalmente, quiero acabar la entrada citando la frase "It´s not always rainbows and butterflies, is compromise that moves us along".